Stay with me,..
Let's just breathe
Nothing you would take,..
Everything you gave.
Hold me till I die,..
Meet you on the other side.

Fumando en la puerta del número doce de Temple street una noche con mi amigo Ra, mirando el canal inglés, en esta eterna primavera britoniana en la que vivo.
Aveces me pregunto de dónde saca tanta fuerza mi prima sardinita, aunque sepa que las sardinas van a parar a una lata, mientras ella sigue nadando contra corriente, ni el recodo le sirve, allí mis posibles amores están persiguiendo a las niñas monas y ninguna sola, luces de colores.... y ella prefiere el monte por el que va la sardina.
Anyway.
Allí estaban ellos, en Holland road, rodeados de camisetas naranjas, y hasta gritando espana, porque no hay nada como irte fuera para ponerte un poco patriotero, eramos los únicos allí y todos nos daban abrazos. Lo bueno vino a la mañana siguiente, la del estanco del té nos felicitaba cuando notaba nuestro acento spaninglish, un grupo de sussex por la calle nos daba voces muy felices dándonos la enhorabuena, el revisor del tren, la señora de la oficina de turismo, los del pub, ibamos por la calle mas ancho que castilla... (¿de dónde viene esta frase?), y nunca hemos estado tan contentos de tener tantas sonrisas inglesas.
En fin. Un momento de estos de aquí. Esto y Nadal, y que Contador va volando por el tour de france... quizás necesitamos olvidarnos de lo desastre que somos en economía y tener un cálido verano.
No me saco esta canción de la cabeza (gracias Ra). Pero sigo en el plan B, C.... hasta el final de nuestro abecedario tengo un montón de juego.