La vida con mi nuevo flatmate es fácil, cada noche prepara unas ensaladas de lujo y me enseña nuevas recetas. Yo todavía no he desecho las maletas, vivo como si tuviese que volverme a mudar en breve, pero él ha puesto la casa muy confortable con cuatro cosillas del aikia. Que suerte aveces haberme encontrado a estos amigos por el camino. Lo bueno de ser tan fiel es el premio, me duran años y años.
Ciudad de contrastes. A veces no echo de menos mi vida en BTN porque si aquello tiene claros oscuros, mi ciudad tiene un batiburrillo de cosas todas juntas y apelotonadas. Eso sí, las buenas son muy buenas. Estoy intentando enamorarme otra véz de este lugar, es mejor vivir ciega de pasión.