Friday, May 14, 2010





Ha llegado el día. Otro año más. Ese llega siempre. A su hora y cumplidor. Nunca falta a su cita. No como los aviones, los novios o  la regla.

Previniendo un día solitario busque y rebusque algo que útil que hacer.  Me apunte a un curso de música africana y danza. Pensé, si estoy bailando todo el día por la noche iré de cabeza a la cama y no notaré el homesick. Así que mañana estoy dando vueltas como un trompo, pero no sola.  Se lo conté a las few people que conozco por aquí y mañana vamos un grupo de 6.  

Ayer antes de entrar a ver el film+concierto del Polansky  y del Glass...

(que el film mu bueno, pero al Glass ya le vale con tanto tecladito machacón)

me aparece con una caja de bombones y una tarjetita muy OTT (Over The Top), me puse a llorar como una cría, algo que no está dentro de lo polite porque se le desencajo la cara, yo intentaba entre mocos y sollozos explicar que no tenía ninguna alergia al chocolate, porque lo primero que piensan aquí es en un problema con la health or  la Safe. 

Es que no me esperaba nada de nada. Y es que le voy dando un valor a las muestras de cariño  que vaya tela. Será la primavera, será que tengo doce meses más de caminito.

 Es el año que ha comenzado antes que nunca y esta sardinita está dando brincos. 

Virgencita (si creyera en ella) que me quede como estoy.