Tuesday, October 10, 2006

Mi amiga estreshita se ha ido a vivir cerca de mi caleta en el norte de áfrica, como es (Ms.CharloteYork) superromantica ha semidejado el desierto por su amore. El otro día nos escribió una carta
(me ha dado permiso para que la cuelgue, así te echamos un poco menos de menos)

es que hay días y días,
hoy he tenido pollo almodovariano con la maruja,
almodovariano porque hemos montao una broncaza en un bar en la feria de San Miguel, que ha finalizado con una huida a lo marisa paredes por mi parte, sigo pensando que es mejor nacer de un huevo.
Aquí ando, estresa porque no tengo ninguna obligación, alguien lo entiende??
Ayer el xurri quedo con su pandilla de amigazos, k aparcan a sus mujeres en sus casas pagadas a medias, pa reunirse un día a la semana y hablar de lo bien que estaban cuando eran solteros durante unas horas antes de volver a sus casas y comerse la tortilla de patatas k les habría dejado sus castradoras esposas en el microondas.
Yo hago uso de mis contactos málagueños (gracias sardinita x prestarme tu vida)
llamo a jcamp y a Emma.
El jcamp sale tarde, xungo,
la Emma no da señales de vida,
me da igual me voy pa málaga aunque sea a verme una buena peliculita en el alfil.
Ayer a las diez estaba conduciendo x la autovia del mediterraneo cuando me llama la Emma k ha quedado con un compañero k quedemos,
soy la mujer más feliz del mundo en ese momento.
Me voy pal centro, y k de gente en los bares, en las terrazas en las calles k fresquito k bien se está.
Me tomo un té, me doy una welta x la calle Larios como una guira,
como veo k al final voy a estar para la hora k salía jcampi lo llamo y quedamos en calle de Bruselas,
mientras lo espero, con mi cerveza y mi periódico
uno solo con una cerveza y un periódico me empieza a contar su vida,
y aunque yo estoy ejerciendo de rara bebiendo solitaria en los bares soy racista con otros raros y no le doy tregua,
llega Emma su amigo y jicamp, estamos, nos reímos, bebemos, (jcamp está como un jeiperman y no puedo evitar tocarle las tetas)
la Emma se emperra en meternos en un bar de hevy metal, donde todos los hombres tenían el pelo más largo k yo,
pero a mi me daba igual me estaba empezando a encontrar en esta ciudad.