fuí con los biólogos, los ornitólogos y los mirólogos de aves a doñana
sin dormir, me suelo poner como una niña pequeña cuando no duerme, llorona, pero entre tanto silencio el sueño no me pesaba, miraba por el catalejo y volaba como la abubilla,
vimos gamos, ciervos, jabalis, zorros, patos, fochas, flamencos, rocieros....
ea, ahí me entro la llorona, estos jaleosos tirando petardos, haciendo litrona por el parque para ir a ver a su virgen,
menos mal que volvimos a camioncito y con Juan, el mejor guía, atravesamos las dunas y nos largamos del jaleo,
vi a mis primos, los chorlitejos, pegando saltitos rápidos en la orilla, y con la cabeza como yo, de chorlito,
vimos muchas ciervas intentando comer todo lo que podian lejos de los petardos de la virgen, con las crias del año pasado y preñadas hasta las orejas, le pregunte a Juan que donde estaban los ciervos -niña, durmiendo, ellos salen en la berrea, sacan pecho, chocan los cuernos, las preñan y desaparecen, el resto lo hacen las ciervas-
tambien nos conto que cuando hay sequia, saben que van a pasar hambre, que no podran alimentar a las crias, se hinflan de savinas y abortan, es la ley natural, sobrevivir sanos. Supongo que no habra un ciervo rocovarela o les queman las savinas. Claro que esas túnicas doradas que se pone no sé como quedarían con tanta cornamenta.
Juan, que sabía de todo, y sobre todo de reírse, me explicaba como el ser humano se había cargado a los linces, que parece que desaparezcan los gatos estos no es importante, pero así se ha descontrolado la cadena que hace que allí exista el agua que le da vida a 14 pueblos, el lince controla el territorio, con lo que el jabalí, el zorro, y los conejos se multiplican lo justo, es lo de la cadena, este se come al otro, el otro abona la tierra, el otro se come las raices que salen del abono, el otro la ara con el ocico, la tierra se asienta, recoje la lluvia......, las aves van y vienen transportand y comiendose to los insectos que sobran por aqui y por alli, pa europa, africa, todo en ordén....... peeeeeeeeeero
como aquello era una tierra de nadie, a uno de un pueblo se le ocurrio ver a la virgen, y ahora empezaron las vallas, las delimitaciones, las carreteras.............
que podia haberse aparecio en el vacie, que allí los pitos, los tambores y las tracas borrachinas no asustan, peeeeeeeeeero......
es verdad, mejor rendirse, total, le comprare a mis sobrinos un botijo pa la que le vamos a dejar, pa que tanta duna, ni bicho, un bonico chalete o resort en la poca arena que queda, pa cantar con un tambor y una estampa del rociiiiiiiiio